25 abril 2006

Antología del disparate

Si se hiciera una readaptación de la ya más que famosa publicación de Luis Jiménez Díez, tomando esta vez como referencia, en lugar a unos estudiantes, al gobierno de ZP, no habría tinta suficiente para escribir todos los disparates de los que son capaces de hacerse cargo.

Y háganse cargo señoras y señores de que no tienen la excusa que podrían tener los estudiantes que motivaron tan divertida publicación, pues un poco brutitos si que son, pero son estudiantes al fin al cabo. No, estos no tienen excusa.

Me pregunto si muchos de aquellos estudiantes son ahora en realidad los que dirigen el rumbo de este país, por que de otro modo no le encuentro explicación alguna a las iniciativas que llevan adelante. Inicitivas como la publicada recientemente por el diario "El Mundo" por la cual se propone equiparar los derechos de las personas con los de los Simios. Así, como lo oyen.

No es que no esté de acuerdo con que se deba proteger a estos animales de muchas atrocidades que con ellos se comenten, pero sinceramente me sorprende que con la cantidad de porblemas serios de verdad, ya no que hay en el mundo, sino que hay en España se preocupen y gasten el tiempo y los recursos públicos en estupideces de semanjante calibre.

Y es que alguno de ellos debe compartir más genes de lo normal con los monos (Con todo mi respeto hacia los monos). Por que sino a mi que expliquen a santo de que hay que equiparar los derechos de los monos con los de las personas, cuando hay personas que sufren una falta de derechos y de cobijo absoluta (Véanse las victimas del terrorismo, por ejemplo).

Puede que nuestro querido ZP simplemente quiera poner a un Chimpancé de Ministro de Asuntos Exteriores o un Gorila en la Cartera de Interior. Yo pondría un Orangután en Defensa, que intimida mucho....

Ante esto me asalta una duda. Supongo que se trata de buscarle tres pies al gato, o habilidades desconocidas a los simios, pero si se les equipara en derechos, también podrán buscar trabajo, y así King Kong podrá regular el tráfico aéreo desde lo alto de Torre Picaso sin que lo derriben, Tarzán por fin se podrá casar con Chita y Marco saldrá del Aremario con su mono Amedio.

¡¡¡¡¡¡Pensar que el planeta de los Simios está clasificado como ciencia ficción, y resulta que un reportaje con visión de futuro!!!!!!!

Por favor, que alguien ponga un poco de cordura y dejen de tirar balones fuera para desviar la atención de los problemas realmente graves.

Esto es divertidísimo :-)

3 comentarios:

José Moya dijo...

En realidad, no se trata de equiparar los derechos de unos y otros, aunque se hable de "derechos humanos" de los simios. Si no, habría que prohibir, por ejemplo, que estuvieran encerrados en los zoológicos, y habría que permitirles derecho al sufragio. Como dice el de la conferencia episcopal (al que, por una vez, le doy la razón en algo) dar "derechos humanos" a un simio es como dar "derechos taurinos" a un ser humano. Son lamentables las condiciones de vida de muchos grandes simios, pero, como dices en el blog, en los países en que estos animales viven, hay muchas personas que sufren las mismas condiciones.

Blanche dijo...

jose: me quedo sin duda con los derecho taurinos para los humanos... jaja , tremendo.
vamos a equiparar los derechos humanos entre los propuios humanos y si eso luego ya hablamos y tal... BESOS GUAPO

Lilith dijo...

Efectivamente, cuando he visto la encuesta en El Mundo (ayer no leí la prensa porque he decidido deprimirme sólo en el trabajo, no en mi casa), lo primero que he pensado es que era de coña. Pero no, era de verdad... equiparar los derechos de los simios a los de las personas... en realidad el texto de la pregunta era todavía menos sutil: ¿deberían concederse algunos derechos de las personas a los simios? Depende, digo yo, porque los derechos de autor... no lo veo claro.
Pero lo importante es hacer cosas extravagantes y no solucionar los problemas de verdad, que eso es muy difícil. Así, saldrá España como la primera que aprueba derechos para los monos, y seremos los primeros en algo...
Aparte de que al paso al que vamos, con niños que salen del cole sin saber matemáticas, igual es una cuestión de prevención, el reconocerles derechos que no van a saber defender de otra manera.