
Daban las 2 del medio día, hora local, del 27 de noviembre, las 11 en España. Volvíamos de comer y al sentarme en mi sitio, de pronto comienzo a notar una extraña sensación. Era como un mareo pero algo raro estaba pasando. La comida me ha sentado mal, pensé… pero la sensación aumentó cuando veo que mi silla se desplaza hacia mi derecha, en ese momento pensé que me estaba desmayando, o algo así...
Cuando miré a César, mi compañero de trabajo y le vi tan normal, pensé: “vaya pedazo de resaca que me gasto…” miro al frente y compruebo que todo se sigue moviendo cada vez más. Aún no habían pasado más que unos pocos segundos… mi silla vuelve a desplazarse esta vez hacia la izquierda acercándose de nuevo a la mesa y por tanto a la pared que hay junto a ella, la cual se venía sobre mí. Esta vez sí compruebo que efectivamente el edificio se movía miro por la ventana del piso 26 donde está la oficina y aquello se tambaleaba más un velero….
En ese momento dije: “César, tío. Que esto se está moviendo…” ¿Cómo? Dice extrañado… que el edificio se mueve, Joder!!!!!!!! Ante su asombro vuelvo a decirlo pero esta vez con tono de interrogación…. Por si acaso mi resaca, y yo estaba haciendo el ridículo, ya sabéis…. Bueno, por fin salen los demás compañeros y ya, una vez confirmado que aquello se movía, hubo otra sacudida. Y todo, en la friolera de no más de 8 ó 9 segundos…
Salimos todos por la escalera de emergencia… o casi todos, por que los dos jefes ante tanta agitación alcanzaron a poco más que a pedirnos que alguien les dejara un cigarrillo… (de algo hay que morir, dijeron…)

Total, que nos fuimos de la torre bajando 26 pisos a pie…( ni imaginarme quiero los del piso 50 el viaje que se pegaron…) sin saber en realidad que estaba pasando, si era un atentado, un terremoto… yo pensaba en un corrimiento de tierras, que con tanta obra como hay por aquí, sobre un terreno de arena…... Es una foto del periodico, no me busqueis por que no estoy....
Al final, un terremoto 6,1 en la escala Richter. Casi nada. A menos de 200 Km de Dubai, en la costa Iraní del estrecho de Ormuz que separa la península arábiga de Irán y que el que venga a verme pasará por allí a ver los fiordos.
Toda una experiencia… y esperemos que quede en eso...